Construire – 2

En Boulogne-sur-Mer, la agencia CONSTRUIRE intervendrá en viviendas sociales, constituidas de pequeñas casas. En lugar de derruirlas, la ciudad decidió rehabilitarlas con fondos propios. La arquitecta Sophie Ricard intentó, viviendo en el barrio durante dos años, adaptar la rehabilitación de las casas a las situaciones individuales de cada habitante. Su trabajo comenzó con el diseño de un pequeño jardín, como manera de integrarse en el barrio y de encontrarse con los vecinos, empezando con los niños. Extraerán de entre los desechos de las obras colindantes para acondicionar invernaderos o un camino a través del jardín. Si bien la falta de medios ha llevado a esta solución, no ha sido difícil de aceptarla, ya que en el barrio varios habitantes tienen experiencia en la recuperación ya que trabajan como chatarreros. La obra, abierta a todos, debutó con el aislamiento exterior de las casas y continuó con la intervención en el interior. El área de la obra (la cité chantier), acondicionada en la casa contigua a la vivienda puesta a disposición de la arquitecta, se convertirá en lugar de encuentro. los obreros comían alrededor de una mesa fabricada con madera de palet por los niños del barrio. El largo diagnóstico y el tratamiento personalizado acordado a las diferentes casas desembocó en la redacción de sesenta licitaciones diferentes. El trabajo realizado sobre el color dará visibilidad a este enfoque individualizado.

Otro proyecto, realizado en Tourcoing, da continuidad a la idea de “reparar en lugar de reconstruir”. Todo ello manteniendo la presencia de los arquitectos en el lugar de la intervención, así como planteando un enfoque individualizado del trabajo a realizar en cada casa. Se trata de casa obreras de ladrillo, cuya demolición se evitó gracias al trabajo de la asociación Rase pas mon quartier. Aquí también habrá que unir las diferentes categorías de habitantes en torno a un mismo proyecto, crear “comunidad”, pero también “la diferenciación”. El taller eléctrico, un espacio sociocultural, será un punto de encuentro y servirá de permanencia arquitectónica. Más concretamente, el trabajo sobre el aislamiento y el revestimiento va acompañado de una reforma interna de las viviendas. Se pone en marcha una red de reutilización a escala del barrio para pequeños elementos como las baldosas. En efecto, las baldosas de cemento constituyen una parte esencial de la identidad de estas casas obreras. En una entrevista realizada para la obra “Matière Grise”, Patrick Bouchain detallaba lo siguiente sobre la red de reutilización: “Por lo tanto, se creó una casa-tienda en la que se puso todo lo que se desmontaba de otras viviendas. Sirvió para los contratistas, pero también para cualquier persona del barrio que podía venir a buscar en este lugar un grifo, un interruptor, un azulejo, una pieza de parquet, una contraventana, una ventana…”

En ambos casos, se trata de “construir de otra manera”, no trabajar para un habitante “medio” que vive en una vivienda “normalizada”, ni de “aplicar ciegamente modelos y estándares preestablecidos”. La consideración de las particularidades de cada uno es lo que ha permitido añadir a los diferentes proyectos esta segunda capa cultural y social de la que habla también Patrick Bouchain. Y la elección de la reutilización para acompañar este enfoque parece obvia. Reutilizar requiere un enfoque también específico, dependiente de cada material procedente de un stock heterogéneo. Pero ya sea la reutilización y el bricolaje que acompaña el trabajo de los obreros en Boulogne-sur-Mer o la red de reutilización establecida en Tourcoing, reutilizar no se convierte en el pretexto para cualquier gesto arquitectónico desconectado. En primer lugar, es una forma lógica de acompañar un proceso. Y la flexibilidad del enfoque de los arquitectos a veces se convierte también en flexibilidad en el diseño de futuras viviendas. Es el caso de las viviendas evolutivas de Beaumont, pequeño municipio rural, donde algunas partes de los edificios pueden ser acondicionados o transformados libremente por los habitantes, en un proceso que recuerda al de la agencia Elemental de Chile. El caso por caso se convierte en un elemento clave que favorece la autoconstrucción así como una posible reutilización a la escala de una vivienda. Este último proyecto como los dos precedentes, aunque no quieran ser demostradores de la reutilización como tal, se esfuerzan sin embargo, cada uno a su manera, de defender una concepción diferente de la arquitectura, ¡la misma que hará posible una futura generalización de la reutilización!


Los diferentes proyectos (Boulogne-sur-Mer, Tourcoing, Beaumont) descritos brevemente en este artículos, se explican con más detalle de manera más completa en la obra colectiva “Pas de toit sans toi”, publicado bajo la dirección de Patrick Bouchain en 2016 en Actes Sud, dentro de la colección L’Impensé. Las otras informaciones provienen de la entrevista realizada a Patrick Bouchain y reproducida en la obra “Matière Grise”, publicada en 2014 por el Pavillon de l’Arsenal bajo la dirección de Encore Heureux.

TYIN tegnestue – 2

La importancia del contexto local específico de cada proyecto es clave en el enfoque de TYIN tegnestue Architects. Se trata de un contexto geográfico, social o cultural, pero las técnicas y los materiales, reutilizados o no, también pueden modelar la identidad de un edificio. Esto es válido para los proyectos realizados en Asia, de los que ya hablamos aquí y también lo es cuando el estudio construye en casa. De esta manera, en Noruega, TYIN tegnestue pone en evidencia la tradición de la construcción de madera a través de la reutilización. En 2014, en el proyecto de interiorismo de una tienda en el aeropuerto de Trondheim, encontramos un tipo de construcción muy particular, la construcción de troncos. Para ello, se desmanteló una antigua casa del siglo XIX destinada a la demolición y se reconstruyó parcialmente, dejando de lado las piezas más dañadas. Algunos troncos también fueron cortados y utilizados a modo de revestimiento mural.

En un proyecto anterior finalizado en 2011 en la localidad de Aure (todavía en Noruega), los arquitectos se apoderaron de otro tipo de edificio, un cobertizo para botes. La sustitución de un cobertizo de madera especialmente dañado por una nueva construcción, con funciones más lúdicas, volvió a ser una oportunidad para hacer hincapié en la reutilización. Parte de los materiales de la antigua construcción se reutilizo in situ. En concreto, se integraron tablas de madera en el revestimiento interior y el revestimiento exterior fue compuesto, en parte, por chapas metálicas que anteriormente se utilizaban para cubrir el techo. Algunos viejos rieles de metal sirvieron como apoyo de una encimera. A estos materiales reutilizados in situ, hay que sumarles las ventanas provenientes de un caserío vecino. Las dimensiones de estas ventanas fueron las que decidieron cual sería la trama estructural de la nueva construcción. Los materiales reutilizados contribuyen así al propio diseño del proyecto haciéndolo evolucionar. Una prueba más de que la reutilización nos obliga a pensar en la lógica del diseño de una manera completamente distinta y nueva.

TYIN tegnestue – 1

El estudio de arquitectura noruego TYIN tegnestue Architects, que recientemente dejó de operar, era conocido por tener un enfoque muy particular de la arquitectura: proyectos pequeños, que a menudo involucraban a estudiantes y también a las comunidades locales, predilección por la artesanía y la reutilización. Si ya os hablamos aquí de los proyectos participativos realizados con estudiantes de escuelas de arquitectura que utilizaban materiales procedentes de la reutilización, la apuesta de la agencia también la ha llevado a realizar varios proyectos, especialmente en Asia, para y con comunidades en situación precaria. La elección, específica al contexto de cada proyecto, de técnicas artesanales y de materiales locales permitió responder a la falta de recursos involucrando además a los habitantes. Por consiguiente, estos podían apropiarse de un edificio cuyo aspecto técnico de la construcción y la dinámica social que había generado debía servir de ejemplo. Dentro de esta lógica, los materiales resultantes de la reutilización son considerados un recurso local y barato, al igual que la madera o la tierra, por ejemplo, y contribuyen igualmente a dar forma al proyecto.

De esta manera, el proyecto Old Market Library realizado en colaboración con CASE Studio Architects y construido en Bangkok (Tailandia) en 2009 implicó en gran medida a los habitantes. Esta transformación de una parte de un antiguo mercado en una biblioteca, fue una oportunidad para poner en práctica sus conocimientos mediante el uso de materiales económicos y disponibles localmente, incluidos muchos materiales reutilizados. Las cajas de madera reutilizadas se convierten así en estanterías para los libros y el revestimiento interior está formado por piezas de madera encontradas en los alrededores. Sin embargo, los elementos estructurales de madera, de un pequeño entrepiso en particular, se compraron en una tienda de segunda mano, con el fin de obtener madera de mejor calidad. Este proyecto, que no es el único, también demuestra que la reutilización no es solo una solución económica y responsable a las necesidades de las comunidades, sino que además puede estimular la creatividad técnica y estética.

Reuse at school

Los proyectos belgas BRIC y MØDÜLL, de los que os hemos hablado aquí, combinan reutilización y formación, y están dirigidos principalmente a aprendices de los oficios técnicos de la construcción. Otros proyectos están más dirigidos a estudiantes de ingeniería o estudiantes de escuelas de arte y arquitectura. A continuación, encontrarán una lista no exhaustiva de proyectos con objetivos a veces diversos, pero que tienen en común una forma de experimentar con la reutilización:

  • La Brighton Waste House es un edificio compuesto en un 85% de residuos de la construcción. Alojado en un terreno de la University of Brighton (Reino Unido), los estudiantes lo usan a diario. Más de 300 estudiantes de arquitectura y diseño, así como aprendices en los oficios de la construcción participaron en su construcción, entre 2013 y 2014, bajo la dirección, entre otros, del arquitecto Duncan Baker-Brown. Este último también participó en la School of Re-construction que tuvo lugar como parte del proyecto europeo FCRBE y también es autor de “The Re-Use Atlas: A Designer’s Guide Towards a Circular Economy”.
  • Rural Studio es un programa de “concepción-realización” de la School of Architecture, Planning and Landscape Architecture of Auburn University (Alabama, EE. UU.) cuyo objetivo es sensibilizar a sus estudiantes sobre el contexto social de los proyectos de arquitectura, al tiempo que proporciona edificios para los más vulnerables. Más de 200 proyectos que involucran a aproximadamente un millar de estudiantes dando un lugar privilegiado a los materiales locales y económicos, incluidos muchos materiales reutilizados.
  • El espacio expositivo RAKE (RAKE Visningsrom) de Trondheim (Noruega) es el resultado de un taller realizado por y para estudiantes de las escuelas de arte y arquitectura de Trondheim, Oslo y Bergen, y que data de 2011. El pabellón, trasladado en 2014, pone de relieve la reutilización de los materiales, como en el caso de la envolvente exterior formada por ventanas reutilizadas. Sobre este tema, ver un artículo disponible en ArchDaily.
  • Los arquitectos noruegos de TYIN Tegnestue, que ya acompañaban el proceso de construcción del espacio expositivo RAKE, tenían la costumbre de involucrar a muchos estudiantes de arquitectura en sus proyectos integrando materiales locales y reutilizados. Asimismo, se llevaron a cabo numerosos proyectos en colaboración con las comunidades locales, particularmente en Asia, pero también en Europa. Por ejemplo, el proyecto Porto Marghera, realizado en Venecia en 2013 por alumnos de la Università Iuav di Venezia, consistía en un conjunto de estructuras hechas con madera reutilizada, proveniente del pabellón canadiense de la Bienal de Arquitectura del año anterior. Los estudiantes del Tecnológico de Monterrey, Puebla (México) y de la NTNU, Norges teknisk-naturvitenskapelige universitet (Noruega) participaron por su parte en el desarrollo de un pabellón de madera completamente reversible (Lyset paa Lista), en Lista (Noruega) en 2013.
  • El arquitecto sevillano Santiago Cirugeda, a través del estudio de arquitectura Recetas Urbanas, promueve la autoconstrucción, la autogestión y también la experimentación en una lógica de participación y apropiación ciudadana. Uno de sus temas favoritos es la reutilización de los materiales y en sus proyectos han participado muchos estudiantes. El espacio Aula Abierta se construyó en 2004 a partir de materiales reutilizados por estudiantes de la Universidad de Granada (Facultad de Bellas Artes). Fue posteriormente desmontado y reconstruido en Sevilla en 2012. En 2016 se inauguró la ampliación de la Escuela Superior de Diseño de Madrid llevada a cabo por y para los estudiantes y sus profesores. El proyecto bautizado La Escuela Crece puede presumir de hacer uso de un 85% de materiales reutilizados.
  • El festival Bellastock creado en Francia hace más de 15 años por la cooperativa de arquitectura del mismo nombre, propone cada año la creación de una ciudad efímera experimental a escala 1:1 a estudiantes principalmente de escuelas de arte o arquitectura. Los experimentos están relacionados, entre otras cosas, con la reutilización de los materiales. El festival se exportó al extranjero y llegó a Madrid, en 2012, 2013 y 2014, liderado por el colectivo Madstock.
  • En Francia, en el marco del proyecto educativo Pôle 21 y de su docencia en la École Nationale Supérieure d’Architecture (ENSA) Marseille, Jean-Marc Huygen, también autor de libro “La poubelle et l’architecte – Vers le réemploi des matériaux” sobre reutilización y al origen del proyecto para una red europea de reutilización lanzado en 2009, participa en experimentos que implican materiales sostenibles o reutilizados. Estudiantes de la ENSA Marseille y de la Université Grenoble Alpes (UGA) y luego de la ENSA Grenoble practican la recolección de materiales y la autoconstrucción en el pueblo de Barjols, o más recientemente en los pueblos de Correns o de Eurre. Para obtener más información, en francés, consultar la obra colectiva “Pôle 21 – 2 ans de réemploi à Barjols”, así como un artículo en la página web de la UGA. Anteriormente, de 2010 a 2012, siempre según la misma lógica, Jean-Marc Huygen acompañado de numerosos estudiantes, ya había participado en los experimentos llevados a cabo en una antigua manufactura de tabaco, la Friche la Belle de Mai (Marsella). Más información sobre este tema en la web matieras.eu.
  • Como parte de una iniciación a la reutilización en la construcción para estudiantes de arquitectura e ingeniería (UGA y ENSA Grenoble), supervisada por la agencia NA architecture (Francia), se realizaron y expusieron en Grenoble (Francia) dos prototipos de marquesinas para bicicletas.
  • Como parte de su enseñanza en la ENSA Paris-Belleville y en la ENSA Bretagne, el arquitecto francés Cyrille Hanappe (AIR Architectures y Actes et Cités) lleva a sus estudiantes a trabajar con habitantes en situaciones precarias, haciendo uso de la reutilización. Participaron, por ejemplo, en el diseño de una cocina colectiva para los habitantes de un barrio de chabolas (reutilización de puertas y ventanas), así como en el de un lavadero y de una sala comunitaria (reutilización de madera de cajas de mudanza, letreros, ventanas).
  • El Atelier Na (Francia), que lleva a cabo experimentos relacionados con la reutilización, tomo parte en escuelas de verano, seminarios o obras participativas, realizo también dos módulos a partir de materiales reutilizados en colaboración con estudiantes del Institut National des Sciences Appliquées (INSA) de Estrasburgo (Francia).
  • El colectivo de arquitectos raumlaborberlin (Alemania), especializado en proyectos participativos con materiales considerados como residuos, organizó un taller en 2011, en el que participaron estudiantes de toda Italia, para construir la Officina Roma, una villa efímera formada por botellas, puertas de coche y bidones de gasolina, entre otras cosas. El proyecto se realizó en el marco de la exposición “Re-Cycle: Strategies for Architecture, City and Planet” propuesta por el MAXXI (Museo nazionale delle arti del XXI secolo) en Roma en 2012. En 2018, en Berlín, el colectivo construyó con numerosos estudiantes la Floating University, un lugar de estudio e investigación que desde entonces se ha convertido en una asociación. Sobre la Officina Roma, ver este artículo de Designboom y sobre la Floating University, este otro artículo de ArchDaily.
  • En el marco del German National Garden Show (BUGA) en Heilbronn (Alemania) en 2019, estudiantes del Karlsruher Institut für Technologie (KIT) participaron junto a profesores en la creación del Mehr.WERT.Garten (Added.VALUE.Garden) y del Mehr.WERT.Pavilion. El pabellón y su entorno están compuestos principalmente por materiales reutilizados o reciclados, como el metal reutilizado que compone la estructura o el vidrio con el que está realizada la envolvente.
  • El taller Ephemeral Permanence 1:1, realizado en 2022 en el marco de la quinta International Conference on Structures and Architecture, en Aalborg (Dinamarca), permitió a estudiantes de diferentes universidades experimentar una construcción circular. La reutilización de materiales (columnas metálicas, vigas y paneles de madera, bloques de hormigón, ladrillos, tejas) y el diseño de un pequeño pabellón totalmente desmontable (uso de mordazas metálicas y de cuerdas elásticas para el montaje) fueron parte de este experimento cuyos supervisores también procedían de diferentes universidades (Aalborg University, ETH Zürich y University of Antwerp). He aquí un artículo sobre este tema en ArchDaily.
  • Recordamos también la participación de los alumnos de la ZHAW (Fachhochschule de Zurich en Winterthur, Suiza) en el trabajo de los arquitectos del Baubüro in situ.

BRIC

En el marco de un programa regional de economía circular (Programme Régional en Économie Circulaire – PREC/Be Circular) y apoyado por el proyecto europeo BAMB (Building as Material Banks, del que os hablábamos por aquí), nació en Bruselas el proyecto BRIC (Build Reversible In Conception). Vio la luz más concretamente en el seno del efp, un centro de formación en alternancia, un sistema de estudio y trabajo, entre otros, de los profesionales de la construcción. BRIC es un edificio sostenible, modular y evolutivo, que integra a la perfección los principios de la economía circular y de la reversibilidad. Construido por y para aprendices del efp, es una herramienta didáctica y pedagógica que permite experimentar pero también formar y sensibilizar a los futuros profesionales de la construcción acerca de prácticas circulares. Y como tal, la reutilización de los materiales de construcción es uno de los grandes objetivos del proyecto. Cabe señalar que más allá de la reutilización y de la integración de los principios de reversibilidad, es también a través del suministro local de materiales sostenibles, de la autonomía energética, de la gestión de aguas pluviales y de la recuperación de aguas grises que el BRIC garantiza un alto rendimiento ambiental.

El proyecto esta constituido por tres edificios sucesivos, BRIC 1, BRIC 2 y BRIC 3, construidos mayoritariamente con materiales del edificio anterior. Cada pabellón tiene su propia apariencia, volumetría y uso. El ciclo de construcciones, deconstrucciones y reconstrucciones se extendió durante 4 años y el BRIC 3, un estudio de radio, se inauguró en junio de 2021. Aunque algunos de los materiales del BRIC 1 ya eran materiales reutilizados (chapas metálicas, suelos de madera, revestimientos y carpinterías), es sobre todo gracias a un diseño reversible que se pudo poner en marcha una verdadera estrategia de reutilización. Asimismo, después de la primera deconstrucción, se realizó un inventario y los arquitectos de la oficina Karbon’ (Karbon’ architecture et urbanisme) pudieron trabajar en el diseño del BRIC 2 integrando los materiales desmontados. Con la misma lógica, los arquitectos realizaron una ampliación del edificio para transformarlo en el BRIC 3. En total, cientos de estudiantes de 11 ramas pudieron formarse a través de la práctica durante la construcción de los distintos pabellones.

Instalado sobre una plataforma montada sobre bases amovibles, el armazón constructivo del BRIC está formado por una serie de columnas y cajas de madera que pueden juntarse según varias configuraciones. Los ensamblajes son mecánicos, y la ubicación de los tornillos está marcada para facilitar el desmontaje. La chapa se utilizó sucesivamente para cubiertas y revestimientos, y los paneles de madera que inicialmente formaban parte del revestimiento se reutilizaron por su parte en forma de tejas y luego de escamas, mediante cortes sucesivos. Aunque los revestimientos a base de arcilla se pueden reutilizar con relativa facilidad, los aprendices pudieron constatar en cambio que la madera maciza es más adecuada para ciclos sucesivos de reutilización que los tableros de OSB. También pudieron observar que el aislamiento de fibra de celulosa, que es rápido de instalar, requiere una aspiración más compleja durante la deconstrucción, así como la perforación de las cajas en varios puntos. Los paneles de fibra de madera parecen proporcionar una mayor flexibilidad.


Varias publicaciones sobre las diferentes etapas del proyecto BRIC se pueden consultar en la página web del proyecto BAMB. En la página web Archi Urbain se puede ver, en francés, un vídeo presentando la última versión del proyecto, BRIC 3.

Otro proyecto bruselense también da un lugar privilegiado a la reutilización y a la formación de futuros agentes del sector de la construcción: en el marco de un concurso organizado por el CDR Construction, estudiantes de Bruselas se formaron en la obra de construcción de un edificio modular, desmontable y transportable, MØDÜLL (2015) seguido de MØDÜLL 2.0 (2017). Más información, en francés, en el Guide Bâtiment Durable.

Collectif Etc – 3

Aunque la madera de palés sea un elemento recurrente en los proyectos de reutilización, otro material estandarizado similar será utilizado de manera interesante en 2012 en el proyecto de modificación del jardín Michelet en Colombes cerca de Paris. Se trata de los paneles de secado para bloques de hormigón de 140x110x4 cm de dimensión. Estos paneles de madera tienen los lados reforzados mediante perfiles metálicos.

El jardín Michelet es uno de los elementos del proyecto R-urban, llevado a cabo por el atelier d’architecture autogérée (aaa). Siguiendo la lógica de crear redes locales y de circuito corto, este proyecto de economía social y solidaria, reagrupa diferentes sectores que se articulan alrededor de las cuestiones como la vivienda (EcoHab), el reciclaje (RecycLab) y la agricultura urbana (AgroCité). El Collecif Etc intervino en el jardín que alberga el Agrocité (ciudad agrícola). La autoconstrucción y la reutilización son parte esencial del proyecto! La intervención trata sobre un espacio técnico y otro de encuentro, unidos por un eje central. El sistema constructivo sigue una trama regular determinada por las dimensiones estandarizadas de los paneles de madera. Se utilizan para cubrir los suelos y las paredes de los diferentes espacios. La regularidad de la trama facilita además los posibles añadidos o modificaciones.

Los paneles de secado y otros materiales de construcción de segunda mano, recuperados en obras o comprados a proveedores especializados, han sido valorizados por el Collectif Etc, así como por el atelier d’architecture autogérée dentro del proyecto principal del AgroCité. Estos recursos han sido listados en la página internet del proyecto. La reutilización de los elementos constitutivos del AgroCité se reanudó durante el traslado del proyecto, ya que fue deconstruido y reconstruido en un nuevo lugar en 2018, en este caso en Gennevilliers.

Se puede encontrar información técnica sobre los paneles de secado en la página de Opalis. Las características técnicas observadas en España pueden diferir ya que las dimensiones de los paneles son inferiores. Aun así, es posible encontrar elementos de segunda mano. Los paneles, aunque a menudo sean de madera, existen también modelos de plástico o de metal.

Collectif Etc – 2

Acostumbrado a trabajar la madera, en 2016 el Collectif Etc participó en la obra de reensamblaje de un antiguo establo de entramado del siglo XIX. Este tuvo lugar en el emplazamiento del Ecomuseo de Alsacia, un museo al aire libre dedicado a las tradiciones y a la vida actual. La reutilización ejecutada tras la deconstrucción y la numeración realizada por los equipos del museo fue acompañada de técnicas tradicionales de la construcción en madera. La visión de la tradición actualizada a los tiempos actuales defendida por el Ecomuseo, se traduce en la reinterpretación de las antiguas técnicas de construcción y la utilización de tornillos o de un muro de hormigón. Algunas antiguas tejas artesanales fueron también reutilizadas. Todo esto nos recuerda la importancia de técnicas a veces olvidadas y las lecciones que podemos aprender a medida que redescubrimos la deconstrucción y la reutilización.

En el mismo lugar, el Collectif Etc a llevado a cabo un trabajo de recomposición de otra estructura en entramado. Esta vez, faltaban algunas piezas y no existía el plano: un verdadero rompecabezas en forma de kit, donde una pequeña placa metálica numerada sobre algunas piezas de madera era la única pista. Las inevitables dificultades encontradas en el camino ilustran la importancia de la deconstrucción y de la numeración, que cuando son correctamente efectuadas, pueden dar lugar a la rápida reutilización de estructuras muy antiguas!

Collectif Etc – 1

Los arquitectos y constructores franceses del Collectif Etc elegieron cuestionar nuestras practicas urbanas y arquitecturales dentro de una lógica de autogestión igualitaria por los usuarios. Desde entonces el colectivo otorga gran importancia al proceso de creación y de experimentación con la voluntad de tejer vínculos con toda una serie de actores de competencias muy diversas. Es el caso del periplo de un año en bicicleta en la búsqueda de la « fábrica ciudadana de la ciudad » (Détour de France), de la incursión en el mundo editorial (la cabane d’édition Hyperville) o de la fundación de un lugar propio para el colectivo y personas colaboradoras (l’Ambassade du Turfu). Esta mezcla de ideas y de practicas lleva naturalmente al colectivo a trabajar con y para la reutilización. La cité de chantier construida cerca de la Grande Halle de Colombelles con varios materiales de reutilización no es el su único proyecto de este ámbito.

De esta manera, en 2012 siguiendo la invitación de los Arpenteurs, el colectivo participó en Grenoble en la transformación de un antiguo local de venta de piscinas. Un edificio industrial cedido por l’Établissement Public Foncier Local (EPFL), para transformarlo en una fábrica de soluciones para la vivienda. Denominado La piscine, el lugar permitiría el debate y la experimentación en torno a las cuestiones de la vivienda, sobre todo a través de la autoconstrucción y la reutilización. Dividido en varios lotes atribuidos a diferentes colectivos, el conjunto reagrupa un taller de fabricación de muebles, un espacio polivalente de encuentro y de discusión, una cocina y una reserva. Gracias a la colecta de materiales, la reserva se organizó como un almacén de recursos en vista de las obras y del uso posterior que tendría el lugar. En él se reutilizó madera de palés, centenares de tablas destinadas sobre todo para la creación de dos grandes mesas. Además se realizó una gran pieza para separar los espacios con jirones de cortinas. La cocina fue equipada con unos antiguos muebles y una bañera. Los restos de madera fueron utilizados para crear las letras de la fachada dando así una nueva identidad al edificio. Dentro de una lógica de transmisión de información, las instrucciones de fabricación fueron adjuntados a los muebles elaborados.

La exposición Matière Grise del Pavillon de l’Arsenal de Paris, cuyos comisarios son los arquitectos de Encore Heureux, viajó a Niza en 2015 al Forum d’Urbanisme et d’Architecture para presentar proyectos de reutilización. Esta nueva edición fue la ocasión para el colectivo de realizar una nueva instalación. Los restos de la exposición precedente, así como el centro de clasificación de residuos de construcción de Veolia, les proporcionó los materiales, principalmente madera de las placas de encofrado, necesarios para la creación de una gama de mobiliario y de un centro de recursos a disposición de la exposición y de los visitantes. El mal estado de estos materiales y las diferentes acciones necesarias para devolverles la utilidad (selección, desclavado, corte, lijado), son muestra de la diferencia que hay dentro de la reutilización entre los recursos que tienen categoría de desechos o los que se reutilizan antes de serlo. Además da muestra de las dificultades de trabajar con recursos que han adquirido la categoría de desechos.

Durante la 16ª Bienal Internacional de Arquitectura de Venecia de 2018, el collectivo participó en la elaboración de la escenografía del pabellon francés cuyos comisarios fueronn los arquitectos de Encore Heureux. Destacando diez experimentaciones francesas, tanto arquitecturales como sociales y culturales, el tema del pabellón, Lieux infinis (Lugares infinitos), corresponde a un colectivo que no construye tanto edificios sino lugares. La escenografía utilizará restos de la contribución francesa en la Bienal de Arte precedente (Studio Venezia del artista Xavier Veilhan): cientos de placas de contrachapado okume. Previamentem desmontados y almacenados, fueron reutilizados in situ, vistiendo la estructura del espacio principal o transformándose en asientos o platillos de taburetes, bancos y mesas creadas para la ocasión.


Otros proyectos relacionados con la reutilización están descritos de manera exhaustiva en la página web del colectivo.