Construire – 2

En Boulogne-sur-Mer, la agencia CONSTRUIRE intervendrá en viviendas sociales, constituidas de pequeñas casas. En lugar de derruirlas, la ciudad decidió rehabilitarlas con fondos propios. La arquitecta Sophie Ricard intentó, viviendo en el barrio durante dos años, adaptar la rehabilitación de las casas a las situaciones individuales de cada habitante. Su trabajo comenzó con el diseño de un pequeño jardín, como manera de integrarse en el barrio y de encontrarse con los vecinos, empezando con los niños. Extraerán de entre los desechos de las obras colindantes para acondicionar invernaderos o un camino a través del jardín. Si bien la falta de medios ha llevado a esta solución, no ha sido difícil de aceptarla, ya que en el barrio varios habitantes tienen experiencia en la recuperación ya que trabajan como chatarreros. La obra, abierta a todos, debutó con el aislamiento exterior de las casas y continuó con la intervención en el interior. El área de la obra (la cité chantier), acondicionada en la casa contigua a la vivienda puesta a disposición de la arquitecta, se convertirá en lugar de encuentro. los obreros comían alrededor de una mesa fabricada con madera de palet por los niños del barrio. El largo diagnóstico y el tratamiento personalizado acordado a las diferentes casas desembocó en la redacción de sesenta licitaciones diferentes. El trabajo realizado sobre el color dará visibilidad a este enfoque individualizado.

Otro proyecto, realizado en Tourcoing, da continuidad a la idea de “reparar en lugar de reconstruir”. Todo ello manteniendo la presencia de los arquitectos en el lugar de la intervención, así como planteando un enfoque individualizado del trabajo a realizar en cada casa. Se trata de casa obreras de ladrillo, cuya demolición se evitó gracias al trabajo de la asociación Rase pas mon quartier. Aquí también habrá que unir las diferentes categorías de habitantes en torno a un mismo proyecto, crear “comunidad”, pero también “la diferenciación”. El taller eléctrico, un espacio sociocultural, será un punto de encuentro y servirá de permanencia arquitectónica. Más concretamente, el trabajo sobre el aislamiento y el revestimiento va acompañado de una reforma interna de las viviendas. Se pone en marcha una red de reutilización a escala del barrio para pequeños elementos como las baldosas. En efecto, las baldosas de cemento constituyen una parte esencial de la identidad de estas casas obreras. En una entrevista realizada para la obra “Matière Grise”, Patrick Bouchain detallaba lo siguiente sobre la red de reutilización: “Por lo tanto, se creó una casa-tienda en la que se puso todo lo que se desmontaba de otras viviendas. Sirvió para los contratistas, pero también para cualquier persona del barrio que podía venir a buscar en este lugar un grifo, un interruptor, un azulejo, una pieza de parquet, una contraventana, una ventana…”

En ambos casos, se trata de “construir de otra manera”, no trabajar para un habitante “medio” que vive en una vivienda “normalizada”, ni de “aplicar ciegamente modelos y estándares preestablecidos”. La consideración de las particularidades de cada uno es lo que ha permitido añadir a los diferentes proyectos esta segunda capa cultural y social de la que habla también Patrick Bouchain. Y la elección de la reutilización para acompañar este enfoque parece obvia. Reutilizar requiere un enfoque también específico, dependiente de cada material procedente de un stock heterogéneo. Pero ya sea la reutilización y el bricolaje que acompaña el trabajo de los obreros en Boulogne-sur-Mer o la red de reutilización establecida en Tourcoing, reutilizar no se convierte en el pretexto para cualquier gesto arquitectónico desconectado. En primer lugar, es una forma lógica de acompañar un proceso. Y la flexibilidad del enfoque de los arquitectos a veces se convierte también en flexibilidad en el diseño de futuras viviendas. Es el caso de las viviendas evolutivas de Beaumont, pequeño municipio rural, donde algunas partes de los edificios pueden ser acondicionados o transformados libremente por los habitantes, en un proceso que recuerda al de la agencia Elemental de Chile. El caso por caso se convierte en un elemento clave que favorece la autoconstrucción así como una posible reutilización a la escala de una vivienda. Este último proyecto como los dos precedentes, aunque no quieran ser demostradores de la reutilización como tal, se esfuerzan sin embargo, cada uno a su manera, de defender una concepción diferente de la arquitectura, ¡la misma que hará posible una futura generalización de la reutilización!


Los diferentes proyectos (Boulogne-sur-Mer, Tourcoing, Beaumont) descritos brevemente en este artículos, se explican con más detalle de manera más completa en la obra colectiva “Pas de toit sans toi”, publicado bajo la dirección de Patrick Bouchain en 2016 en Actes Sud, dentro de la colección L’Impensé. Las otras informaciones provienen de la entrevista realizada a Patrick Bouchain y reproducida en la obra “Matière Grise”, publicada en 2014 por el Pavillon de l’Arsenal bajo la dirección de Encore Heureux.

Construire – 1

El arquitecto francés Patrick Bouchain, del que ya os hemos hablado antes, se le conoce también por trabajar en la reconversión de edificios industriales en espacios culturales. El taller de arquitectura CONSTRUIRE, que fundó junto a Loïc Julienne, no se limita solo a estos proyectos. Sin embargo, son una parte importante de su trayectoria arquitectónica, que propone una visión anticonformista de la arquitectura. Su práctica se centra ante todo en el momento crucial de la fase de obra, haciendo participar a los diferentes profesionales en la evolución del proyecto e integrando una lógica de reutilización.

La primera reutilización es la de los propios edificios o de su estructura. Es el caso del Lieu Unique en Nantes, que ocupa los muros de la antigua fábrica LU para hacer un centro cultural, incluyendo una sala de espectáculos, espacios de exposición, un restaurante… El cambio del programa inicial de rehabilitación ha permitido, realizando lo estrictamente mínimo, reducir el presupuesto necesario. Estas intervenciones mínimas, dejan a la vista las diferentes etapas de la historia del lugar, la fábrica, el edificio abandonado y el centro cultural. El aspecto experimental del proyecto, la importancia de la obra, que se convierte en un verdadero acto cultural y en la que participan una multitud de actores, especialmente a través de una cabaña de obras, lugar de encuentro y documentación, le dará una verdadera dimensión pedagógica. La reutilización, llevada a cabo en la obra toma a su vez esta dimensión pedagógica, además de política, simbólica o estética, o simplemente de sentido común: reutilizar lo que se pueda, y preservar lo que ya sirve.

Algunos materiales reutilizados provienen del mismo edificio. Se trata por ejemplo de las placas de acero que formaban parte del suelo de la fábrica, donde las trazas de la antigua actividad del lugar están todavía visibles, de una mesa de oficina o de una escalera de emergencia proveniente de una anterior restructuración, o de los ladrillos recuperados en demoliciones parciales. A esta reutilización in situ hay que añadirle la de los restos de estas mismas demoliciones para crear una terraza en el borde del edificio. Además, se hizo un llamamiento a los artesanos que participaron en el proyecto para que aportaran materiales que pudieran ser reutilizados. Muchos son restos, de excedentes o son materiales desclasificados porque se consideran no conformes. Profesionales externos a la obra acabaron también contribuyendo en esta búsqueda de materiales. Piezas de madera proveniente de barcos que iban a ir al desguace, así como madera de demolición recubren la pasarela que forma el perímetro de la sala de espectáculo. La barra y las sillas del restaurante proceden de donaciones. Detrás del edificio y de la sala de espectáculos, se creó el Grenier su Siècle, una colección monumental donde se guardan en recipientes metálicos sellados objetos donados por los habitantes. Este espacio cerrado está destinado a ser abierto en 2100, es decir, un siglo después de su creación. Los toneles o las cajas metálicas que contienen los objetos son también donaciones. El vidrio que reviste la fachada del Grenier du Siècle es también reutilizada. Las diferentes piezas utilizadas habían sido anteriormente rechazadas por la reglamentación. Para poder integrar estos materiales, la fachada y el patchwork de vidrio de reutilización han sido declarados obras de arte. Barriles cortados por herreros malienses especializados en el reciclaje de nuestros desechos se integraron en el techo de la sala de espectáculos como aislamiento acústico. Para poder traerlos a Francia, del mismo modo que la fachada de vidrio, tuvieron que ser denominados obras de arte. Tablas hechas con los restos de madera restante de la fabricación de piraguas y cosidos entre ellos por los mismos artesanos formaron parte del proyecto, a modo de paneles para el restaurante.

Siguiendo la misma lógica, el estudio llevará a cabo otros proyectos de reconversión de antiguos edificios industriales, como Le Magasin en Grenoble, La Condition Publique en Roubaix o Le Channel en Calais. Patrick Bouchain y el estudio CONSTRUIRE se dedican a su vez a la construcción de edificios nuevos, sin dejar de lado su interés por la reutilización. Así, en la Academie Fratellini en Saint-Denis, un centro de arte y de formación en artes circenses, se recuperó madera procedente de los jardines del castillo de Versailles, donde numerosos árboles habían caído debido a una tormenta. La madera se integró prácticamente en la estructura de las gradas de la sala de espectáculos, sobredimensionando las secciones de la madera inicialmente previstas. El revestimiento exterior se realizó mediante chapas metálicas onduladas provenientes de un centro comercial donde fueron rechazadas porque el color era no conforme. Estas fueron solapadas para esconder los agujeros de la colocación inicial. Además se pintaron parcialmente para evitar que se roñaran en las zonas de corte. La reutilización y la colocación por solape llevados a cabo, así como las líneas de pintura antióxido, dan lugar a un ensamblaje aleatorio y componen la peculiaridad del proyecto.

Patrick Bouchain y Loïc Julienne participaron además, junto con Sonia Vu y ConstructLab, en la construcción de una sala de fiestas para una Universidad Popular en Argentan. Esta, denominada Le Manable, está realizada principalmente de materiales de recuperación. Otros proyectos del estudio, aunque no estén realizados necesariamente con materiales procedentes de la reutilización, dado su carácter efímero o móvil, integran o incitan a la deconstrucción y la reutilización. Es el caso de los museos itinerantes o efímeros, como el Centre Pompidou Mobile, que ha viajado entre varias ciudades francesas, o como las Étincelles du Palais de la découverte, una versión temporal – destinada a ser reutilizada- de un museo parisino, actualmente en obras. Es el caso también de salas de espectáculos bajo carpa, como La Volière, Le Centaure o Le Caravansérail.


Algunos proyectos (Le Lieu Unique, L’Académie Fratellini) descritos en este artículo, se describen de manera más concisa en las obras “Le Lieu Unique –Le chantier, un acte culturel / Nantes” de Christophe Catsaros, publicado bajo la dirección de Patrick Bouchain en 2006 de la mano de Actes Sud, dentro de la colección L’impensé, así como “L’Académie Fratellini – Le cirque de plain-pied / Saint-Denis” de Coline Serreau et Charlotte Erlih, publicado en 2008 dentro de la misma editorial y colección. Otra información proviene de la entrevista realizada a Patrick Bouchain y reproducida en el libro “Matière Grise”, publicado en 2014 por el Pavillon de l’Arsenal bajo la dirección de Encore Heureux.

Exhibitions – 3

Hay una exposición que evidencia el interés que la reutilización despierta en el Pavillon de l’Arsenal de Paris, y también a cada vez más actores del sector de la construcción Parisino. La exposición Conserver Adapter Transmettre (Conservar Adaptar Transmitir), que termino en marzo de este año, presentaba alrededor de cuarenta proyectos parisinos que decidieron no demoler el edificio existente, ya que tenían en cuenta que cada metro cuadrado nuevo construido emite alrededor de 1,5 tonas de CO2 durante 50 años. Se trata de proyectos recientes, en fase de realización, cuyos permisos de construcción han sido introducidos entre 2020 y 2022. Proyectos que transforman lo existente (representan el 70% de las autorizaciones de urbanismo presentadas en París) donde la reutilización de los materiales tiene su importancia, y que pone en relieve “nuevos modos de fabricación que combinan desafíos climáticos, voluntades patrimoniales y programaciones adaptadas a las expectativas contemporáneas”. Estos proyectos son una verdadera inspiración para quien quiera desarrollar paralelamente el sector de la reutilización y la de los materiales de origen orgánico y geológico.

Es el caso del proyecto Au Fil du Rail de los arquitectos de Grand Huit, la reconversión de un antiguo edificio industrial en lugar de recursos de la economía circular y solidaria en los campos de la alimentación y la industria textil, inicialmente previsto para el 2023, en el que se realiza una reutilización de materiales in situ y ex situ. Las carpinterías de la antigua prefectura de Morland se integran al cerramiento del edificio. Lo mismo sucede en el proyecto super-équipement Pinard de la agencia ChartierDalix, ayudados por R-Use para la reutilización. Previsto para el 2025, prevé la transformación de una maternidad en equipamiento híbrido que aglutina las funciones de guardería, escuela, gimnasio y tercer lugar abierto a los habitantes. El 49,6% de la masa de los materiales proviene de materiales reutilizados o reciclados, como el 100% de las tejas, los ladrillos, los marcos de madera y la carpintería existente, lo que reduce un 11,6% las emisiones de carbono del proyecto. La reutilización también está presente en el proyecto surélévation Lenoir, con la rehabilitación de un edificio de actividades artesanales con el objetivo de añadir plantas para viviendas sociales, previsto para el 2024. Para esta elevación, los arquitectos de Boman, ayudados de Bellastock para la reutilización, han recurrido a materiales provenientes de la deconstrucción de inmuebles que pertenecen a Paris Habitat, como el parquet, las baldosas, las puertas o el equipamiento eléctrico. En el proyecto Scène des Loges, de la agencia Archikubik, ayudados por Mobius, previsto para el 2024, reutilizarán elementos de interior para la transformación de un antiguo garaje en viviendas. Que tantos proyectos recurran a la reutilización en un territorio tan limitado es la prueba de que algo está cambiando. La visibilidad que ofrecen estas exposiciones que cuestionan nuestras maneras de construir, recalca también la emergencia de utilizar nuevas prácticas constructivas. Entre estas, la reutilización de materiales de construcción parece ocupar un lugar.

Más allá de esta exposición, el interés de Pavillon de l’Arsenal por la reutilización no es nueva. Cabe recordar, por ejemplo, la exposición Matière Grise (de 2014 a 2015), de la que ya hablamos aquí y que sigue siendo la referencia y la más completa sobre el tema, pero no es la única. Ya en 2012, la exposición Re.architecture se hizo eco de estas prácticas, presentando el trabajo singular de 15 agencias europeas, como Assemble, Collectif Etc, Raumlabor o Rotor. En 2016, la exposición de los resultados de la convocatoria de proyectos urbanos innovadores Réinventer Paris, presentaba proyectos para los que la reutilización era un punto esencial. Entre ellos, el proyecto Morland así como la futura Ferme du Rail, de los que ya os hemos hablado. Otros proyectos desarrollados en el marco del acelerador de proyectos arquitectónicos y urbanos innovadores FAIRE fueron expuestos en el Pavillon de l’Arsenal. Es el caso en 2022, de la investigación llevada a cabo por Cigüe del hormigón de yeso a base de reutilización, del que ya hablamos aquí o de FabBRICK en 2018, un proyecto de ladrillos de material textil reutilizados, diseñado por la arquitecta Clarisse Merlet. Es el caso también de los proyectos M.E.G.A. de Niveau Zéro Atelier y de Terres émaillées de Lucie Ponard, que utilizan tierra de excavaciones parisinas para la producción de objetos o azulejos. Estos proyectos, así como FabBRICK, formarán parte de la exposición Séries Limitées de 2022. De manera similar, la exposición Terres de Paris (de 2016 a 2017) presentaba el trabajo de los arquitectos de la agencia de arquitectura Joly&Loiret sobre la construcción en tierra cruda extraída del subsuelo parisino. Dentro del acelerador de proyectos FAIRE y de Studiolo, un programa de miniexposiciones, la instalación de 2021 Académie du climat x 36 étudiants architectes x Encore Heureux: un café en projet cuenta la concepción colaborativa bajo la dirección de Encore Heureux del futuro café de la Academia del Clima en París, donde la reutilización de materiales es un factor importante. Presentado en el marco del Studiolo en 2021 y del acelerador de proyectos FAIRE, el proyecto Ceci n’est pas une porte permitió la recuperación y transformación de 1200 puertas de un antiguo hospital parisino, en total, 60 m³ de material. Las experimentaciones y la creación de muebles de la mano de los arquitectos Vincent Parreira y Marie Brodin, acompañados por Mobius, especializado en el asesoramiento en reutilización, desembocarán en la fabricación de más de 200 mesas, con la ayuda de personas en reinserción profesional gracias a la asociación ARES (Asociación para la Reinserción Económica y Social).

De manera más general, la predilección de los equipos de Pavillon de l’Arsenal por los materiales naturales y locales, como la tierra o la piedra (ver la exposición Pierre de 2018), y los artesanos que trabajan con ellas (ver la exposición Ressources de 2022), junto con las preocupaciones sociales o ambientales (prueba de ello la exposición Et demain, on fait quoi? presentado en el momento de la crisis del Covid 2020, o las exposiciones más recientes del 2023, Espaces Ferroviaires, matières vivantes o [Ré]inventer l’existant), reflejan la necesidad de una nueva forma de concebir la arquitectura, que integra la reutilización. Y aunque estas exposiciones no hablan solamente de reutilización, dan a conocer las diferentes razones o medios que pueden facilitar su resurgimiento o, puede que un día, ¡su generalización!


La exposición Conserver Adapter Transmettre se acabo el 5 de marzo de 2023, y permitió la publicación de una obra con el mismo título, Conserver Adapter Transmettre.

TYIN tegnestue – 2

La importancia del contexto local específico de cada proyecto es clave en el enfoque de TYIN tegnestue Architects. Se trata de un contexto geográfico, social o cultural, pero las técnicas y los materiales, reutilizados o no, también pueden modelar la identidad de un edificio. Esto es válido para los proyectos realizados en Asia, de los que ya hablamos aquí y también lo es cuando el estudio construye en casa. De esta manera, en Noruega, TYIN tegnestue pone en evidencia la tradición de la construcción de madera a través de la reutilización. En 2014, en el proyecto de interiorismo de una tienda en el aeropuerto de Trondheim, encontramos un tipo de construcción muy particular, la construcción de troncos. Para ello, se desmanteló una antigua casa del siglo XIX destinada a la demolición y se reconstruyó parcialmente, dejando de lado las piezas más dañadas. Algunos troncos también fueron cortados y utilizados a modo de revestimiento mural.

En un proyecto anterior finalizado en 2011 en la localidad de Aure (todavía en Noruega), los arquitectos se apoderaron de otro tipo de edificio, un cobertizo para botes. La sustitución de un cobertizo de madera especialmente dañado por una nueva construcción, con funciones más lúdicas, volvió a ser una oportunidad para hacer hincapié en la reutilización. Parte de los materiales de la antigua construcción se reutilizo in situ. En concreto, se integraron tablas de madera en el revestimiento interior y el revestimiento exterior fue compuesto, en parte, por chapas metálicas que anteriormente se utilizaban para cubrir el techo. Algunos viejos rieles de metal sirvieron como apoyo de una encimera. A estos materiales reutilizados in situ, hay que sumarles las ventanas provenientes de un caserío vecino. Las dimensiones de estas ventanas fueron las que decidieron cual sería la trama estructural de la nueva construcción. Los materiales reutilizados contribuyen así al propio diseño del proyecto haciéndolo evolucionar. Una prueba más de que la reutilización nos obliga a pensar en la lógica del diseño de una manera completamente distinta y nueva.

TYIN tegnestue – 1

El estudio de arquitectura noruego TYIN tegnestue Architects, que recientemente dejó de operar, era conocido por tener un enfoque muy particular de la arquitectura: proyectos pequeños, que a menudo involucraban a estudiantes y también a las comunidades locales, predilección por la artesanía y la reutilización. Si ya os hablamos aquí de los proyectos participativos realizados con estudiantes de escuelas de arquitectura que utilizaban materiales procedentes de la reutilización, la apuesta de la agencia también la ha llevado a realizar varios proyectos, especialmente en Asia, para y con comunidades en situación precaria. La elección, específica al contexto de cada proyecto, de técnicas artesanales y de materiales locales permitió responder a la falta de recursos involucrando además a los habitantes. Por consiguiente, estos podían apropiarse de un edificio cuyo aspecto técnico de la construcción y la dinámica social que había generado debía servir de ejemplo. Dentro de esta lógica, los materiales resultantes de la reutilización son considerados un recurso local y barato, al igual que la madera o la tierra, por ejemplo, y contribuyen igualmente a dar forma al proyecto.

De esta manera, el proyecto Old Market Library realizado en colaboración con CASE Studio Architects y construido en Bangkok (Tailandia) en 2009 implicó en gran medida a los habitantes. Esta transformación de una parte de un antiguo mercado en una biblioteca, fue una oportunidad para poner en práctica sus conocimientos mediante el uso de materiales económicos y disponibles localmente, incluidos muchos materiales reutilizados. Las cajas de madera reutilizadas se convierten así en estanterías para los libros y el revestimiento interior está formado por piezas de madera encontradas en los alrededores. Sin embargo, los elementos estructurales de madera, de un pequeño entrepiso en particular, se compraron en una tienda de segunda mano, con el fin de obtener madera de mejor calidad. Este proyecto, que no es el único, también demuestra que la reutilización no es solo una solución económica y responsable a las necesidades de las comunidades, sino que además puede estimular la creatividad técnica y estética.

Ferme du Rail

La Ferme du Rail, inaugurada en París en 2019, es un equipamiento de barrio en torno a la agricultura urbana. Situado en un terreno de difícil acceso, junto a una vía de ferrocarril en desuso, es un espacio de producción agrícola pero también un lugar de solidaridad, alojamiento, formación, restauración y encuentro. Los dos edificios de la granja agrupan en torno a una huerta central un comedor-restaurante, un almacén y un invernadero, a los que se suman veinte alojamientos destinados a trabajadores en riesgo de exclusión social y estudiantes de ingeniería, arquitectura u horticultura. Esta granja low-tech, con diseño bioclimático, materiales renovables o reutilizados, que mira hacia la permacultura y tiene una finalidad social, nació de la convocatoria de proyectos urbanos innovadores Réinventer Paris, lanzada en 2014.

En el origen del proyecto encontramos la cooperativa de arquitectos Grand Huit, que sitúa su acción en el ámbito de la economía circular pero también social y solidaria, así como la paisajista Mélanie Drevet. Estos habitantes y usuarios del barrio se rodearon de una serie de actores que se iban a convertir en los futuros operadores del lugar, como la empresa de integración Travail et Vie, las asociaciones Atoll 75 y Bail Pour Tous, y también la organización Réhabail que llegara a ser promotora del proyecto. Esto se hace dentro de un contexto particular, ya que el ayuntamiento de París sigue siendo propietario del terreno, cedido en virtud de un contrato de arrendamiento de 50 años. El acceso al suelo, facilitado por los poderes públicos, se completa con un mosaico de financiación pública y privada. Esto permite prever un programa ambicioso tanto desde el punto de vista ecológico como social. La reutilización de los materiales, que responde a estos dos imperativos, es un elemento importante para los diseñadores, para quienes “reutilizar los materiales y trabajar con personas en integración responde a la misma lógica. No volver a tirar y no volver a excluir”¹.

Trabajar con “lo que ya está”, con “lo que queda” se convierte para los miembros de Gran Huit en uno de los aspectos de una nueva forma de trabajar. Para ellos, la reutilización, la “valorización de lo abandonado”, tiene una dimensión práctica pero deriva sobre todo de una postura moral y política: “la reutilización no es ante todo la explotación de nuevos «yacimientos», sino la reivindicación de una atención inédita hacia la materia y las personas”¹. Más allá de los imperativos ambientales, para los arquitectos es una manera de “preservar el acceso al trabajo para todos, significante y no opresivo”¹, ya que elegir una reutilización local también es una forma de reintroducir la función obrera y artesanal en el centro de la ciudad.

Por otro lado, insisten en la dimensión memorial de la reutilización. Porque si entre los frenos a la reutilización, el más importante parece quizás el ideológico, conviene “educar las miradas para percibir la belleza de los abandonados que han vuelto a ser deseables”¹. Devolver su verdadero lugar a los materiales y a quienes trabajan con ellos, y por tanto al proceso. Esto los lleva a recuperar el verdadero valor del tiempo de la obra de construcción. Se trata, de asociar a los futuros usuarios desde muy temprano, abriéndo la entrada a la obra de construcción, iniciando además determinadas actividades en el lugar antes incluso de su desarrollo final. La idea es hacer de la obra de construcción un espacio democrático de creación, con un ambiente favorable a la formación. Varias empresas de integración participaron también el la construcción de la granja, confiándoles 5 lotes de los 16 lotes técnicos. He aquí otro intento para devolverle a la arquitectura su dimensión social, en oposición a una arquitectura-objeto. Además se ha realizado una ACV para dar idea de los beneficios a atribuir al edificio, de muy bajo impacto ambiental (estructura de madera, aislamiento de paja, revestimiento de madera de castaño, uso de materiales renovables y reutilizados). Sin embargo, este análisis no tiene en cuenta el aspecto social del proyecto. Por ello, los arquitectos abogan por nuevos indicadores de riqueza y un enfoque del “coste global” de cada proyecto que integre este aspecto.

He aquí una lista de materiales reutilizados en el proyecto:

  • ventanas de madera provenientes de edificios de viviendas sociales renovados, transformadas en jardineras utilizadas en la cubierta a modo de barandilla (madera arenada y reensamblada en paneles) o en suelo de madera a la testa para la sala común (mismo stock de madera, esta vez trozeado), todo ello realizado por el Atelier R-are;
  • madera contrachapada procedente de la Semana de la Moda y destinada a la fabricación de armarios para los dormitorios;
  • piedras de las calles de Paris provenientes de los almacenes de la ciudad y utilizadas en el jardín (muros de contención de piedra seca, escalones, pavimento);
  • lonas publicitarias provenientes de la Réserve des Arts transformadas en estores por Les Résilientes;
  • Baldosas desparejadas procedentes de excedentes de stock y destinadas a los baños (la identidad específica de cada uno requiere un despiece cada vez diferente).

El descubrimiento de la reutilización y de su adecuación con un enfoque ecológico y social llevó a los arquitectos a desarrollar esta práctica. Así, el proyecto de la Maison des Canaux de París, cuya construcción está en curso y que pretende ser un referente para la economía circular, social y solidaria, tiene la misión de convertirse en un demostrador de la reutilización. Proyecto piloto realizado en el marco del proyecto europeo FCRBE, del que ya os hablamos aquí, ¡tiene como objetivo integrar del 70 al 100% de materiales procedentes de una reutilización local!


¹ Este artículo está inspirado en gran medida en el libro La Ferme du Rail – Pour une ville écologique et solidaire escrito en francés por Clara y Philippe Simay, miembros de la cooperativa Grand Huit, y publicado en 2022 por Actes Sud, en la colección “Domaines du possible”. Las diversas citas están tomadas de él y traducidas al castellano por Adokin.

Más específicamente sobre la reutilización, podemos encontrar una presentación de Clara Simay, realizada en el marco del ICEB Café el 19 de septiembre de 2019, disponible en la página web del ICEB.

Collectif Etc – 3

Aunque la madera de palés sea un elemento recurrente en los proyectos de reutilización, otro material estandarizado similar será utilizado de manera interesante en 2012 en el proyecto de modificación del jardín Michelet en Colombes cerca de Paris. Se trata de los paneles de secado para bloques de hormigón de 140x110x4 cm de dimensión. Estos paneles de madera tienen los lados reforzados mediante perfiles metálicos.

El jardín Michelet es uno de los elementos del proyecto R-urban, llevado a cabo por el atelier d’architecture autogérée (aaa). Siguiendo la lógica de crear redes locales y de circuito corto, este proyecto de economía social y solidaria, reagrupa diferentes sectores que se articulan alrededor de las cuestiones como la vivienda (EcoHab), el reciclaje (RecycLab) y la agricultura urbana (AgroCité). El Collecif Etc intervino en el jardín que alberga el Agrocité (ciudad agrícola). La autoconstrucción y la reutilización son parte esencial del proyecto! La intervención trata sobre un espacio técnico y otro de encuentro, unidos por un eje central. El sistema constructivo sigue una trama regular determinada por las dimensiones estandarizadas de los paneles de madera. Se utilizan para cubrir los suelos y las paredes de los diferentes espacios. La regularidad de la trama facilita además los posibles añadidos o modificaciones.

Los paneles de secado y otros materiales de construcción de segunda mano, recuperados en obras o comprados a proveedores especializados, han sido valorizados por el Collectif Etc, así como por el atelier d’architecture autogérée dentro del proyecto principal del AgroCité. Estos recursos han sido listados en la página internet del proyecto. La reutilización de los elementos constitutivos del AgroCité se reanudó durante el traslado del proyecto, ya que fue deconstruido y reconstruido en un nuevo lugar en 2018, en este caso en Gennevilliers.

Se puede encontrar información técnica sobre los paneles de secado en la página de Opalis. Las características técnicas observadas en España pueden diferir ya que las dimensiones de los paneles son inferiores. Aun así, es posible encontrar elementos de segunda mano. Los paneles, aunque a menudo sean de madera, existen también modelos de plástico o de metal.

Collectif Etc – 1

Los arquitectos y constructores franceses del Collectif Etc elegieron cuestionar nuestras practicas urbanas y arquitecturales dentro de una lógica de autogestión igualitaria por los usuarios. Desde entonces el colectivo otorga gran importancia al proceso de creación y de experimentación con la voluntad de tejer vínculos con toda una serie de actores de competencias muy diversas. Es el caso del periplo de un año en bicicleta en la búsqueda de la « fábrica ciudadana de la ciudad » (Détour de France), de la incursión en el mundo editorial (la cabane d’édition Hyperville) o de la fundación de un lugar propio para el colectivo y personas colaboradoras (l’Ambassade du Turfu). Esta mezcla de ideas y de practicas lleva naturalmente al colectivo a trabajar con y para la reutilización. La cité de chantier construida cerca de la Grande Halle de Colombelles con varios materiales de reutilización no es el su único proyecto de este ámbito.

De esta manera, en 2012 siguiendo la invitación de los Arpenteurs, el colectivo participó en Grenoble en la transformación de un antiguo local de venta de piscinas. Un edificio industrial cedido por l’Établissement Public Foncier Local (EPFL), para transformarlo en una fábrica de soluciones para la vivienda. Denominado La piscine, el lugar permitiría el debate y la experimentación en torno a las cuestiones de la vivienda, sobre todo a través de la autoconstrucción y la reutilización. Dividido en varios lotes atribuidos a diferentes colectivos, el conjunto reagrupa un taller de fabricación de muebles, un espacio polivalente de encuentro y de discusión, una cocina y una reserva. Gracias a la colecta de materiales, la reserva se organizó como un almacén de recursos en vista de las obras y del uso posterior que tendría el lugar. En él se reutilizó madera de palés, centenares de tablas destinadas sobre todo para la creación de dos grandes mesas. Además se realizó una gran pieza para separar los espacios con jirones de cortinas. La cocina fue equipada con unos antiguos muebles y una bañera. Los restos de madera fueron utilizados para crear las letras de la fachada dando así una nueva identidad al edificio. Dentro de una lógica de transmisión de información, las instrucciones de fabricación fueron adjuntados a los muebles elaborados.

La exposición Matière Grise del Pavillon de l’Arsenal de Paris, cuyos comisarios son los arquitectos de Encore Heureux, viajó a Niza en 2015 al Forum d’Urbanisme et d’Architecture para presentar proyectos de reutilización. Esta nueva edición fue la ocasión para el colectivo de realizar una nueva instalación. Los restos de la exposición precedente, así como el centro de clasificación de residuos de construcción de Veolia, les proporcionó los materiales, principalmente madera de las placas de encofrado, necesarios para la creación de una gama de mobiliario y de un centro de recursos a disposición de la exposición y de los visitantes. El mal estado de estos materiales y las diferentes acciones necesarias para devolverles la utilidad (selección, desclavado, corte, lijado), son muestra de la diferencia que hay dentro de la reutilización entre los recursos que tienen categoría de desechos o los que se reutilizan antes de serlo. Además da muestra de las dificultades de trabajar con recursos que han adquirido la categoría de desechos.

Durante la 16ª Bienal Internacional de Arquitectura de Venecia de 2018, el collectivo participó en la elaboración de la escenografía del pabellon francés cuyos comisarios fueronn los arquitectos de Encore Heureux. Destacando diez experimentaciones francesas, tanto arquitecturales como sociales y culturales, el tema del pabellón, Lieux infinis (Lugares infinitos), corresponde a un colectivo que no construye tanto edificios sino lugares. La escenografía utilizará restos de la contribución francesa en la Bienal de Arte precedente (Studio Venezia del artista Xavier Veilhan): cientos de placas de contrachapado okume. Previamentem desmontados y almacenados, fueron reutilizados in situ, vistiendo la estructura del espacio principal o transformándose en asientos o platillos de taburetes, bancos y mesas creadas para la ocasión.


Otros proyectos relacionados con la reutilización están descritos de manera exhaustiva en la página web del colectivo.

Exhibitions – 2

La lista de exposiciones consagradas a la reutilización es aun larga. Si la Bienal de Lugano estuvo en 2020 íntegramente dedicada a la reutilización, la Bienal de Venecia tampoco se queda fuera. El pabellón alemán presentó en 2012 la exposición Reduce, Reuse, Recycle (ver articulo sobre este tema en Archdaily). En 2018 el pabellón danés expuso el trabajo de Vandkunsten Architects que añaden una cuarta R a los tres precedentes, el de Rebeauty. El proyecto, basado en investigaciones previas, se interroga sobre la reutilización de seis materiales a través de la investigación y la construcción tamaño natural de prototipos (1:1 mock-up) pensados para ser desmontados.

2018 es tambien el año en el que Flores & Prats Arquitectes presentaron el proyecto de la sala Beckett, Assemble una instalación de baldosas de cerámica destinadas a la reutilización (The Factory Floor) y Encore Heureux y el Collectif Etc trabajan recuperando materiales de una antigua instalación (video visible arriba). Dos años antes, Alejandro Aravena utilizo más de 90t de residuos provenientes de la Bienal de Arte de 2015 (articulo sobre este tema disponible en Dezeen). También en 2016, dentro de los proyectos presentados por el pabellón español, ganador del León de Oro a la mejor participación nacional, figuran varios ejemplos de reutilización. Es el caso de la Casa Collage (Bosch.Capdeferro arquitectures) en Girona, proyecto residencial donde las piedras, las baldosas o los herrajes han sido reutilizados in situ. Es el caso también de la Nave 8b. del Matadero de Madrid (Arturo Franco) donde numerosas tejas reutilizadas conforman tabiques, dándoles un nuevo uso.

Como ejemplo de que las diferentes ediciones se suceden pero que el tema no pierde importancia, el pabellón japonés de la edición 2021 de la Bienal está dedicado este año a la reutilización, bajo el titulo Co-ownership of Action: Trajectories of Elements. El proyecto presenta elementos provenientes de la deconstruccion de una casa tradicional de madera, algunos de esos elementos habiendo sido reutilizados en una nueva configuración (ver articulo sobre este tema en Designboom). Este trabajo sobre el ensamblaje de elementos de madera se hace además eco de la reflexión sobre las construcciones de estructura de madera del pabellón de Estados Unidos o las casas Puutalo prefabricadas en madera del pabellón finlandés.


La Bienal de Arquitectura de Venecia tiene lugar en este momento del 22/05 al 21/11/2021.

El trabajo de Vandkunsten Architects sobre los prototipos y la reutilización ha dado lugar a la publicación de un informe, descargable aquí.

Exhibitions – 1

La reutilización ha estado en el punto de mira en los últimos años, ya sea gracias a las exposiciones temáticas directamente ligadas o aquellas sobre las nuevas maneras de construir en un contexto de crisis social, medioambiental y económica.

Una de las más conocidas en Francia ha sido la exposición Matière Grise, en marcha desde 2014, patrocinada por el Pavillon de l’Arsenal y cuyos comisarios eran los arquitectos de Encore Heureux. La exposición que invita a utilizar más materia gris y menos materias primas presentaba 75 proyectos de reutilización a través del mundo y hacía hincapié en el potencial de esta práctica. Más tarde la exposición se volvió itinerante y visito numerosos lugares en Francia y en el extranjero. Es el caso de Barcelona o del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) en 2017 o de Anglet en 2019.

En Bruselas, la exposicion Life under a cherry tree de los Belgas de Rotor presento en 2019 en La Loge una serie de materiales provenientes de deconstrucciones, así como una reflexión sobre la reutilización. Esta exposición daba continuación a otras presentadas en 2015 en Lieja (Deconstruction), en 2016 en Burdeos (Deconstruction) en el seno de la exposición constellation.s imaginada por arc en rêve centre d’architecture, en 2017 en Hasselt sobre la reutilización de baldosas cerámicas (Ceramic tiles), una reflexión sobre la arquitectura sostenible presentada en 2013 en la Oslo Architecture Triennale (Behind the Green Door) u otra en 2010 sobre el desgaste de los materiales (Usus/usures) protagonista del pabellón belga en la Bienal de Venecia.

Los daneses de Lendager Group presentaban en 2017 en el Danish Architecture Centre la exposición Wasteland (Artículo sobre este tema disponible en Archdaily).

El trabajo de los ingleses d’Assemble fue objeto de una exposición en 2017 en el Architekturzentrum Wien (Az W) bajo el título How We Build. El trabajo de los suizos de Baubüro in situ fue presentado en 2018 en el Swiss Architecture Museum en Basilea (S AM) dentro de la exposición Transform y recientemente ha formado parte de una exposición en Graz en la Haus Der Architektur (HDA). La exposición llamada Material Loops, agrupaba trabajos teóricos y prácticos alrededor de los materiales de reutilización. Entre ellos proyectos alemanes, austriacos o neerlandeses, como por ejemplo aquellos de Superuse Studios.


La exposición Matière Grise ha dado lugar a obra, reeditada hace poco por el Pavillon de l’Arsenal, disponible aquí.